Blog / BIM & Construction Management

¿Conoces la tercera parte de la norma BIM - ISO 19650-3?

Tras la publicación del artículo dedicado a las normas UNE en ISO 19650-1 e ISO 19650-2, traemos la entrega de la tercera parte relativa a la fase de operación y mantenimiento. Como veíamos, en las dos primeras partes se abordaban los conceptos y principios básicos, junto con el detalle del proceso de contratación para la construcción de un activo 1. Cabe resaltar que la norma ISO 19650-3 fue publicada en julio de 2021 y adoptada dentro del catálogo de UNIT en noviembre del mismo año, gracias al trabajo de un comité especializado integrado por delegaciones de numerosos sectores de la industria tanto pública como privada. Este período representa el intervalo de tiempo dentro del ciclo de vida 2 de mayor inversión por parte del propietario, que está fuertemente condicionada (hasta en un 80% como muestra la Figura 1) por las decisiones tomadas por el equipo de proyecto, lo que refuerza el carácter colaborativo de la metodología BIM, que intenta integrar a la mayor cantidad de actores en la cadena productiva en edades tempranas del activo. A su vez, cualquier cambio o desviación en esta instancia repercute de manera crítica, dado que su costo relativo asociado aumenta diez veces por cada etapa que se avanza en el proyecto. Figura 1. Izquierda: Tabla con costo relativo de modificaciones en cada etapa del ciclo de vida de un proyecto. Derecha: Curva Costo - Tiempo en las distintas etapas de un proyecto. Figura 1. Izquierda: Tabla con costo relativo de modificaciones en cada etapa del ciclo de vida de un proyecto. Derecha: Curva Costo - Tiempo en las distintas etapas de un proyecto,

Gestión de activos VS. Operación y mantenimiento


Apenas nos adentramos en las primeras páginas de la norma ISO 19650-3 nos encontramos con conceptos de suma importancia. Se nos define la Gestión de Activos y la Operación y Mantenimiento de Activos (o Facility Management) como disciplinas independientes, con sus propias normas y metodologías, aunque por simplicidad las denomina de la misma manera. A pesar de todos los puntos de contacto que tienen guardan una diferencia clave: el valor que generan. Figura 2. Definiciones de Gestión de Activos y Operación y Mantenimiento de Activos según la norma ISO 19650-3 Figura 2. Definiciones de Gestión de Activos y Operación y Mantenimiento de Activos En la Figura 2 se muestran las dos definiciones dadas por la norma ISO 19650-3. Mientras que en la gestión del activo se trata de obtener un valor económico como parte del retorno de la inversión inicial que requirió su creación, adoptando un enfoque más global y de negocios, en la operación y mantenimiento se pone el foco en el día a día del activo y en la calidad de vida de los usuarios y su entorno, monitoreando que tanto equipos como instalaciones funcionen de manera eficaz y eficiente. Como es de esperarse, un buen mantenimiento redundará en una mejor gestión del activo, dado que generarán ahorros en los costos operativos y por tanto mayores utilidades para el propietario.

Conformación de equipos


La estructura de trabajo consta de tres niveles jerárquicos, como muestra la Figura 3. Figura 3. Estructura de un equipo de gestión (I), compuesta por los distintos equipos de producción (II) y de trabajo (III). Los intercambios de información pueden ser internos (línea punteada) o externos (línea sólida). Fuente: Norma UNIT - ISO 19650-3 Figura 3. Estructura de un equipo de gestión (I), compuesta por los distintos equipos de producción (II) y de trabajo (III). Los intercambios de información pueden ser internos (línea punteada) o externos (línea sólida). Fuente: Norma UNIT - ISO 19650-3
    • Parte contratante (A), que puede ser el propietario del activo, el operador o el gestor de este. Es el agente receptor de la información que se va a generar, en función de sus necesidades organizacionales.
    • Partes contratadas principales (B). Son los proveedores directos de la información requerida por la parte contratante.
    • En un tercer escalafón se encuentran las llamadas partes contratadas (C), que configuran los equipos de trabajo designados por la parte contratada principal para producir la información que fuera encomendada por la parte contratante, con los estándares de calidad acordados y en los plazos estipulados. El equipo que forman la parte contratada principal y sus distintos equipos de trabajo se denomina equipo de producción, mientras que el conjunto de actores conforman el equipo de gestión del activo.
Si hacemos una revisión de la segunda parte de la serie de normas 19650, donde se detalla la organización de los equipos en la fase de desarrollo del proyecto, podemos encontrar que su estructura es muy similar. Los equipos de trabajo se denominan de la misma manera, mientras que los equipos de producción son análogos a los equipos de desarrollo y el equipo de gestión del activo tiene su símil en el equipo de proyecto.

Definición de eventos desencadenantes


A diferencia del desarrollo de un proyecto, donde hay una decisión intencionada de iniciar un proceso, en el caso de la gestión de activos las actividades se basan en la ocurrencia de ciertos eventos que arrasran a los equipos a actuar. La norma identifica dos tipos:
    • Previstos. Comprende tareas de mantenimiento preventivo, inspecciones estratégicas o peticiones de reparación rutinarias relacionadas con la vida útil de los equipos. Como puede deducirse, este tipo de eventos pueden planificarse y, por lo tanto, la contratación de los equipos de producción puede realizarse de manera anticipada a su ocurrencia.
    • Imprevistos. Eventos raros o imprevisibles, que obligan a actuar de forma reactiva a los acontecimientos y contratando a los equipos de producción luego de que se han producido. Generalmente están asociados a eventos ambientales, fallas de abastecimiento externo o anomalías ocultas en los equipos e instalaciones.
Varios ejemplos de eventos desencadenantes pueden encontrarse en el anexo A3 de esta norma.

Proceso de gestión de la información


Previo a hacer un resumen de las etapas a seguir para el manejo de la información durante la etapa de gestión de un activo, junto con los pasos que componen el proceso, vale la pena repasar los paquetes de información que se generan, detallados en la Parte 1 de la norma 19650:
    • OIR: Recoge los requisitos de información relativos a los objetivos de la organización, que pueden ser de carácter estratégico, táctico u operacional. En el anexo A2 de la norma se pueden encontrar varios ejemplos.
    • AIR: Recoge los requisitos de información relativos al activo, que pueden tener un carácter de gestión, técnico, jurídico, comercial o financiero. En el anexo A4 de la norma se pueden encontrar varios ejemplos.
    • PIR: Recoge los requisitos de información relativos al desarrollo del activo.
    • EIR: Recoge los requisitos de información relativos a las contrataciones de los distintos actores del proyecto.
    • AIM: Modelo de información relacionado con la fase de operación.
    • PIM: Modelo de información relacionado con la fase de desarrollo.
Figura 4. Progresión de los requisitos de información. Fuente: Norma UNIT - ISO 19650-3 Figura 4. Progresión de los requisitos de información. Fuente: Norma UNIT - ISO 19650-3 A la hora de adquirir un activo se deben evaluar las necesidades de información, tanto a nivel de la organización como del activo en sí mismo. De esta manera será posible llevar un mejor control de los eventos desencadenantes que resulten del análisis realizado por la parte contratante. Este trabajo comprende la designación de un responsable que gestione la información del activo, la definición del OIR, la identificación de los activos con que se va a trabajar y la definición de su AIR. Además de encargarse de la detección de los posibles eventos desencadenantes que puedan producirse y el establecimiento de la información de referencia para el equipo de gestión como normas, métodos y procedimientos, trabajando dentro de un entorno común de datos (CDE). Todo esto deriva en la generación de un AIM que deberá ser debidamente mantenido de acuerdo a protocolos preestablecidos o definidos en esta etapa. Ahora bien, esta adquisición se puede dar de dos formas. Si la parte contratante recibe un activo ya construido, los pasos se reducen a la entrega y aceptación del modelo de información correspondiente. En la otra alternativa, en la que una parte contratante se encarga del desarrollo y mantenimiento de un activo, la información puede gestionarse antes o después del evento desencadenante que está demandando dicha información.

Seis pasos clave de la norma BIM - ISO 19650-3

  1. Petición de ofertas / Solicitud de prestación de servicios. Comprende el llamado a interesados en realizar las tareas de gestión de la información del activo. En este paso se determina el EIR, se reúne la información de referencia y se definen los requisitos de presentación de ofertas y los criterios para su evaluación, que serán debidamente comunicados a las partes contratadas candidatas.
  2. Respuesta a la Petición / Solicitud. Una vez que cada candidato recibe la información generada por la parte contratante, estos deben designar sus responsables para la gestión de la información, establecer un Plan de Ejecución BIM (en adelante PEB), evaluar sus aptitudes y capacidades a nivel de equipo de producción y de trabajo, elaborar una evaluación de riesgos y recopilar toda esta información para ser entregada como parte de la oferta de servicios.
  3. Contratación. La parte contratante deberá evaluar todas las propuestas recibidas y contratar a uno o varios candidatos dependiendo del alcance del proyecto. Inmediatamente después, cada parte contratada principal deberá confirmar su PEB, establecer una matriz de responsabilidades, su propio EIR y un plan de entrega de la información, todo esto a nivel de general (equipo de producción) y a nivel de tarea (equipo de trabajo). Toda esta información completará los documentos de la contratación, tanto entre la parte contratante y la parte contratada principal como entre esta última y las distintas partes contratadas que conforman los equipos de trabajo.
  4. Movilización. Se trata de la implantación de los recursos humanos y materiales al lugar de trabajo. En esta etapa también se realizan pruebas de las metodologías y procedimientos preestablecidos para asegurar que los recursos serán suficientes para cumplir con los objetivos trazados.
  5. Producción. En esta etapa, cada equipo de trabajo debe realizar una verificación previa de toda la información de referencia y los recursos compartidos para luego proceder a generar la información solicitada. También es responsable del control de calidad 3 de cada contenedor de información previo a ser compartido con el resto del equipo de producción y registrar cualquier incidencia durante el proceso. Luego el equipo de producción deberá hacer una segunda revisión de toda la información recibida por cada equipo de trabajo y así autorizar, si no hubiera observaciones, la entrega a la parte contratante.
  6. Aceptación del modelo de información. Una vez recibida la información generada por los equipos de producción, la parte contratada principal deberá realizar su propia revisión para que, si no hay observaciones, sea aceptada e integrada al modelo de información del activo o AIM.

Actualidad de la gestión de activos con metodología BIM en Uruguay


Vale la pena preguntarnos: ¿Qué grado de madurez alcanzó la metodología BIM en esta etapa del ciclo de vida de los activos en el ámbito uruguayo? Para contestar esta pregunta, invité a formar parte de este artículo al Arq. Sebastián Sanabria, CEO de Estudio ESE, para que nos brindase más información al respecto y esto es lo que nos contó: Tanto empresas privadas como públicas están actualmente implementando BIM para la gestión, operación y mantenimiento de los activos. Lógicamente son las menos, pero lo importante es que ya es una realidad. Desde Estudio ESE, hemos trabajado en esta línea con empresas públicas como UTE y ANCAP, mientras que en el ámbito privado estamos trabajando en el edificio que será el más alto de Montevideo. Es importante no pensar en este uso BIM solamente aplicable para grandes proyectos o complejidades. Teniendo en cuenta que el objetivo es obtener el máximo rendimiento y vida útil de los activos, es aplicable para todo tipo de proyecto.

Tres claves a tener en cuenta para potenciar el uso BIM

  • La primera es definir con claridad las necesidades de información para dar respuesta a los eventos desencadenantes, tanto los previstos como los imprevistos. Desde un punto de vista técnico, esto es definir cuál es la metadata que se le incorporará a los activos. A pesar de que tienta tener gran cantidad de campos de información, la recomendación es reducir éstos al mínimo, para evitar que luego se vuelva compleja la usabilidad.
  • Gestionar la información desde el principio del proyecto, previo a la construcción, se vuelve esencial. Estructurar todas las fuentes de información y datos en etapas tempranas, colaborará a generar activos digitales más confiables y funcionales. Es cierto que este uso es perfectamente aplicable para activos existentes, pero en este caso, habrá que entender con claridad cuál es el alcance de los modelos de información. Para estructurar la información, recomiendo definir un flujo de trabajo y estándares a seguir.
  • Finalmente, el modelo de información del activo (AIM), debe mantenerse actualizado, de lo contrario pierde credibilidad y rápidamente se convierte en obsoleto. Para esto es importante que se haya construido el modelo siguiendo los lineamientos establecidos y que se tomen en cuenta las herramientas de trabajo del equipo que estará a cargo de la gestión.
operación y mantenimiento BIM A pesar que los proyectos que están implementando BIM para la gestión, operación y mantenimiento son los menos, creo que a nivel nacional (Uruguay) se están dando pasos importantes. Sobre todo a nivel público, ya que son quienes traccionan la industria y aceleran la transformación. Por lo tanto, imagino que en menos de dos años estaremos viendo un aumento significativo de este uso en las solicitudes de propuestas y licitaciones.

Conclusiones de la norma ISO 19650-3


  • Si bien la naturaleza de las fases de desarrollo y mantenimiento parecen estar distantes, son muy similares en su estructura de trabajo (conformación de equipos) y procedimientos de contratación y producción de la información. Este aspecto no es casualidad, tomando en cuenta que una de las premisas de la metodología BIM es la integración de los distintos actores de la cadena productiva en edades tempranas de los proyectos.
  • La familia de normas UNIT - ISO 19650 no hacen más que reafirmar la importancia de algunos conceptos que son pilares de la metodología BIM. Por ejemplo, los procesos que rigen el trabajo de los equipos de gestión juegan un rol clave, mucho más preponderante que por ejemplo, el software que se utiliza. También se hace énfasis en contenedores de información, que es un concepto que va más allá que la información gráfica - volumétrica y sobre todo en esta etapa, donde los metadatos (como certificados de fabricantes, plazos, etc.) juegan un papel preponderante.
  • El hecho que el Estado, inversor clave en nuestra cadena productiva, comience a transitar el uso de la metodología BIM para el mantenimiento de sus activos, además de la adopción por parte de UNIT de la norma que ocupa este artículo, significan avances muy interesantes en este campo para la industria del país, si bien son solo el comienzo de un largo y desafiante camino por recorrer.
ISO 19650
Foto de perfil de Rodrigo Sánchez del Río Rodrigo Sánchez del Río. Ingeniero Civil. Alumni del Máster Internacional en BIM Management. Coordinador BIM en SACEEM.
 
Z
Autor

Zigurat Global Institute of Technology